El KPI en logística es fundamental para medir el éxito de la empresa y ejecutar acciones que permitan una mejora continua en esta área del negocio. Esta serie de ratios y datos permiten a las compañías tener una base sobre la cual poder tomar las decisiones correctas.
¿Qué son los KPI en logística?
En una empresa de logística, los KPI están formados por una relación de datos numéricos que permiten mostrar el rendimiento de un proceso en comparación con un punto determinado del histórico de la compañía, o bien cuando se va a llevar a cabo cualquier tipo de benchmarking logístico.
De esta forma, es posible cuantificar el desempeño de muchos procesos diferentes, como la recepción de mercancías, así como la gestión de inventario.
Los KPI por sí solos no son suficientes para poder sacar conclusiones. Es conveniente que haya unos objetivos previamente definidos que, junto al contexto, permitan establecer una serie de metas que se deben alcanzar. Generalmente, el rendimiento en logística se basa en cuatro tipos de objetivos distintos: tiempo, coste, productividad y calidad del propio servicio.
Tipos de indicadores en logística
Los indicadores de logística se desarrollan en las diferentes áreas de trabajo a lo largo de toda la cadena de distribución. Los principales tipos son los siguientes:
• KPI de abastecimiento: Se controla el proceso de entrada de nuevo stock en el almacén, así como las conversaciones con los proveedores.
• KPI de transporte logístico: Se valora el impacto que tiene el movimiento de mercancías en cada uno de los tramos de la cadena de suministro.
• KPI de almacenamiento: Se refiere a todo lo relacionado con almacenar stock.
• KPI de inventario: Analiza el movimiento de stock a lo largo de la cadena de suministro.
El KPI en logística es fundamental para poder cuantificar todo el trabajo desarrollado a lo largo de toda la cadena de distribución y encontrar puntos de mejora.
