Vehículo y suministro suponen dos de los puntos clave del mundo de la logística. Actualmente, es necesario movilizar la mercancía desde el origen hasta el usuario. Para ello es preciso contratar servicios de transporte adaptados a las necesidades y a las características de cada negocio.
Vehículo, logística y transporte por carretera como iconos de las actividades esenciales
El transporte de mercancías se puede considerar una actividad esencial dentro de la cadena de suministro. Gracias a este tipo de servicio puede darse una gestión específica al flujo de productos.
Si se desea un servicio de transporte óptimo, es preciso conocer los tipos de transporte de mercancías más adaptados a las características de la mercancía y del receptor. Existen respuestas para todo tipo de necesidades, aunque una de las más demandadas es la terrestre.
En el transporte terrestre de mercancías también existen categorías. No obstante, la modalidad más flexible y práctica es la que se realiza por carretera.
Para el transporte mercantil por carretera existe gran diversidad de medios que permite adaptar el servicio. Además, hoy en día, el transporte de productos de cercanía asociado a la vida urbana es uno de los que presentan más auge. Las entregas destinadas a dar servicio al comercio electrónico y al reparto de última milla han transformado el sector.
¿Con qué tipo de vehículo debe contar una empresa de logística?
Hoy en día, existe una amplia gama de medios de transporte con los que una empresa puede hacer frente a sus repartos. Además, cada uno de ellos cuenta con modelos específicos para cada mercancía y envío. Los más habituales son los camiones, los furgones y las furgonetas, aunque hay más.
- Los camiones: Pueden alcanzar diferentes longitudes y se adecuan a sus ejes y a la capacidad de carga que soportan. No obstante, están formados por una cabina y un remolque o una plataforma de arrastre. Pueden ser articulados o rígidos e incorporan sistema de refrigeración. Algunos disponen de apertura fácil, e incluso lateral, para facilitar la descarga y mejorar los tiempos de reparto.
- Los tractocamiones: Disponen de una gran capacidad de arrastre y llevan un semirremolque o plataforma.
- Los tráileres: Son muy grandes y altos. Generalmente, alcanzan los tres metros de longitud y cuentan con gran capacidad de carga.
- Los furgones: Son transportes destinados a cargas secas o a paquetería. Disponen de un sistema de seguridad optimizado, ideal para mercancías empaquetadas.
- Las góndolas: Sirven para transportar camiones y maquinaria pesada. Soportan cargas de hasta cuarenta toneladas.
- Las furgonetas: Son primordiales en el reparto de mensajería, envíos exprés y entregas de última milla.
Hoy en día se está apostando por la eficiencia, de manera que muchos de estos transportes ya son eléctricos o híbridos.
Adquirir o mantener una flota propia es muy costoso para la gran mayoría de empresas. Por eso, la contratación de un servicio de transporte de mercancías externo supone la solución para muchas empresas. Vehículo y logística de mercancías se aúnan, y el transporte por carretera se convierte en un medio flexible, seguro y versátil para el reparto puerta a puerta.