La digitalización ha cambiado la operativa de los servicios logísticos. Poco a poco van quedando atrás las herramientas tradicionales que, pese a que siguen siendo útiles, no son imprescindibles. El impacto de las nuevas tecnologías ha generado un importante cambio en los modelos de negocio, especialmente en el transporte de mercancías.
La digitalización en las empresas de logística
La digitalización ya no es una alternativa: es una obligación para las empresas. Es más, las compañías que no se adaptan sufren problemas de competitividad. El contexto actual es el del transporte sin fronteras a lo largo de toda la geografía mundial. Por ello, no es de extrañar que la Unión Europea impulse la digitalización en el sector, ya que ahorra tiempo y dinero.
Las maneras en que se relacionan las empresas con los clientes han cambiado. Estos cambios se han producido a la par que los consumidores han cambiado sus patrones de consumo.
Digitalizarse es sinónimo de crecer para las empresas de logística
Apostar por la digitalización es importante para las empresas, ya que les ayuda a crecer. Diferentes estudios, además, demuestran que la capacidad que tienen las compañías de adaptarse a la tecnología está íntimamente ligada a su solvencia.
Así, son miles las organizaciones que han conseguido superar diferentes escenarios adversos, como la última crisis vivida en España. Las empresas que contaban con tecnologías avanzadas han tenido elevados niveles de supervivencia. Es más, han conseguido crecer en momentos en los que el acceso a la financiación es difícil.
No obstante, sigue existiendo una gran diferencia de uso y adaptación entre las grandes empresas y las pymes. Estas últimas siguen todavía rezagadas: muchas de ellas piensan que la digitalización se reduce, únicamente, a tener una conexión a Internet.
Los servicios logísticos (transporte de mercancías) necesitan la digitalización. Ahorran dinero y tiempo, además de suponer un «salvavidas» para miles de organizaciones. No adaptarse significa no poder competir.