Muchos negocios no pueden permitirse el lujo de quedarse sin stock, ya que para ellos es de vital importancia contar con un inventario de reserva. Muchas personas tienen dudas sobre este concepto, por lo que en este post se darán algunas claves para explicar de manera sencilla el funcionamiento de esta reserva de inventario. Gracias a este post, se podrá saber qué es y cómo se calcula.
Qué es un inventario de reserva
El inventario de reserva es la forma en la que algunas empresas se preparan para determinados acontecimientos. Estos acontecimientos pueden ser el deterioro, el robo o cualquier impacto negativo que repercute sobre sus inventarios.
Las empresas se valen de este método como forma de reevaluación o previsión de ventas con las que dar cuenta del inventario que ya no sirve o cuyo coste es mayor que el que supone en el mercado.
Es decir, la reserva de inventario sirve como estimación interna del inventario en exceso o no sirviente. Esto se informa en una cuenta de valoración, la cual hace que se reduzca el inventario que refleja el balance general. Por lo tanto, este último balance informa de las reservas existentes verdaderamente.
Cómo calcular correctamente la reserva de inventario
Una vez llegados hasta aquí, es momento de saber qué es y para qué sirve una reserva de inventario. Lo siguiente sería saber calcularla, algo que se explicará en las siguientes líneas.
Plazo de entrega máximo
Refleja el tiempo máximo en caso de que ocurra algún fallo en la producción.
Demanda media
Refleja la cantidad mínima de productos que son necesarios para poder cubrir en ocasiones en las que ocurra un problema en la producción.
Fórmula
Como la demanda nunca es fija, hay que aproximarse a su cálculo lo máximo posible. Para ello, hay que tomar como referencia el coeficiente de variación de la demanda. Del mismo modo, se puede considerar el nivel adecuado de disponibilidad de inventario que la empresa tenga con el fin de evitar roturas en el stock.
Reaprovisionamiento de inventario
El reaprovisionamiento debe seguir una política en cada empresa, pudiendo ser continuo o periódico dependiendo de esta. El continuo controla el inventario siempre que se termina una transacción, ya sea a la entrada o a la salida de los productos. En cambio, el reaprovisionamiento periódico consiste en revisar el inventario cada cierto tiempo, por lo que la cantidad de productos que sea necesaria debe ser cubierta en ese tiempo concreto.
Punto de pedido
Una vez que se sabe con certeza cuál es el inventario de reserva adecuado y se llega a la cantidad mínima de productos, se procede a realizar el pedido. Esta fase es la denominada como punto de pedido, y se realizará en función del tipo de reaprovisionamiento que siga la empresa.
En definitiva, el inventario de reserva es un método para prevenir y tener el stock adecuado en cada momento. Con él, la empresa puede tener siempre establecida la cantidad de productos de los que dispone, tanto en el presente como en el futuro.