Cuando se habla de logística, el transporte de productos especiales puede marcar la diferencia entre unas empresas y otras. Cumplir con las necesidades de logística de productos perecederos o sustancias peligrosas, al tiempo que se garantiza un buen servicio a los clientes, ayudará a posicionar una compañía en el mercado internacional.

 

Tipos de transporte de productos especiales

Los transportes de productos especiales son aquellos que, por las características de las mercancías, requieren un tratamiento adecuado en su traslado. Puede ser por su volumen. Por la posibilidad de que los productos perecederos pierdan sus propiedades. Por los riesgos asociados que las sustancias entrañan. Pero, en todo caso, para transportar estos productos será imprescindible la pertinente autorización.

Transporte de productos especiales

 

Transporte y logística de mercancías voluminosas

El Reglamento General de Vehículos establece que las dimensiones máximas en el transporte ordinario son de 16,5 metros de longitud y 2,5 de anchura. Todas las mercancías que superen estas dimensiones necesitarán de un permiso especial. Este es el caso de grandes vigas de construcción, piezas de molinos eólicos u otros materiales de este estilo. Se vuelve necesario solicitar diversas autorizaciones a los organismos pertinentes, como la Dirección General de Tráfico

(genérica, específica o excepcional) para evitar inconvenientes e imprevistos en la logística de mercancías voluminosas.

Transporte y logística de productos perecederos

En algunos sectores, como el de la alimentación o la química, la mercancía debe transportarse en buenas condiciones hasta su destino para evitar que se deteriore. Por tal razón, en la logística de productos perecederos se distinguen diversos tipos de vehículos:

  • Isotermos (unidades aisladas de las condiciones cambiantes del exterior).
  • Refrigerados (fuente de frío en el interior que se alimenta desde fuera).
  • Frigoríficos (con compresores de frío).
  • Caloríficos (dispositivo interno que genera calor).

A nivel internacional, el Acuerdo ATP establece las normas que rigen sobre estas mercancías. Así, por ejemplo, la carne, los pescados, la fruta, las verduras o los medicamentos deben estar entre 0 y 8 ºC. Y los productos congelados deben mantenerse siempre entre -12 y -20ºC.

 

Transporte y logística de sustancias peligrosas

Mención aparte en este aspecto merecen las mercancías peligrosas. Por sus características, su manejo puede dar lugar a graves riesgos para el medio ambiente. También para la seguridad y salud de los transportistas o las personas que estén en las proximidades del vehículo. Son, entre otras, los líquidos, sólidos o gases inflamables, las sustancias tóxicas, los compuestos radiactivos, materiales explosivos o corrosivos.

El transporte y la logística de sustancias peligrosas están regulados por otro acuerdo internacional, el ADR. Se actualiza de forma bienal. Cada tipo de mercancía peligrosa debe estar identificada, de manera visible, con la etiqueta correspondiente. Existen nueve grupos distintos de materiales peligrosos.