Que los productos lleguen a tiempo, que el recuento del inventario encaje, que los costes logísticos no se disparen… todo es el resultado del trabajo de una analista de logística. Este profesional conecta los distintos departamentos y convierte los datos en decisiones estratégicas.
¿Qué es un analista de logística?
Un analista logístico es un profesional con formación en negocios, en logística o en comercio internacional, que se especializa en la planificación, proyección, coordinación estratégica de todas las operaciones asociadas al abastecimiento, almacenamiento y distribución de productos en una empresa.
Puede trabajar tanto in-house (dentro de la empresa fabricante, distribuidora o retail) como de forma externa, ya sea como parte del equipo de un operador de logística integral o como consultor especializado.
Exactamente, ¿un analista de logística qué hace? Su principal responsabilidad es evaluar, optimizar y monitorizar los procesos a lo largo de la cadena de suministro, para garantizar que se desarrollen de manera eficiente y rentable para el cliente. Para ello, se encarga de hacer el seguimiento al flujo de la mercancía, de mantener una base de datos logísticos actualizada, de controlar la facturación, de comunicarse con los transportistas y de recomendar ajustes para mejorar la eficiencia de las operaciones.
¿Por qué confiar en un analista de logística?
Un analista de logística ofrece a las empresas un enfoque operativo basado en datos, lo que permite tomar decisiones informadas y estratégicas que permiten optimizar cada fase de la cadena de suministro. Para ello, este profesional posee un profundo dominio de las métricas clave de desempeño y emplea diversas herramientas tecnológicas avanzadas para asegurar su visión global de las operaciones logísticas.
Gracias a estas capacidades, el analista logístico puede contribuir a reducir los costes, a controlar el inventario, a definir rutas de transporte, a identificar cuellos de botella, a solucionar problemas de almacén y a detectar oportunidades de mejora para los procesos. Además, su intervención es clave para gestionar riesgos y garantizar un alto nivel de servicio.
Funciones de un analista de logística
Veamos con más detalle en qué consisten las funciones y responsabilidades de un analista logístico:
1. Gestión de inventarios
Un analista de logística utiliza modelos predictivos que pronostican la demanda, como los sistemas impulsados por algoritmos de IA que procesan datos y detectan patrones. Con base en esto, puede prever los requerimientos futuros y establecer políticas de reposición de mercancías, definiendo los niveles mínimos y máximos de stock o los tamaños de lote óptimos. Por supuesto, siempre asegurando el equilibrio entre la disponibilidad del producto y la rentabilidad en el almacenamiento.
Además, desarrolla iniciativas para reducir los inventarios de lento movimiento y mejorar la rotación de inventarios. Por ejemplo, en la gestión de stock puede aplicar técnicas de categorización, como el análisis ABC o el modelo XYZ, que permiten clasificar los productos según su rotación o valor.
2. Planificación de rutas y transporte
El analista de logística orquesta el movimiento de mercancías. Esto incluye evaluar la eficacia de las estrategias empleadas en el transporte y proponer o implementar mejoras. Por ejemplo:
- Emplea sistemas inteligentes para trazar rutas que minimicen el consumo de combustible, disminuyan la distancia recorrida y/o reduzcan el tiempo de envío.
- Evalúa las ventajas de uso del transporte multimodal, con base a los criterios de confiabilidad, velocidad y coste.
- Garantiza la trazabilidad y monitorización en tiempo real del envío.
- Gestiona la contratación de transportistas externos.
3. Análisis de datos
Un analista de logística se encarga de recopilar y estudiar los datos sobre la demanda, el inventario, los costes, el rendimiento de las operaciones… Para ello, asegura la consolidación y centralización de la información que proviene de distintos sistemas y departamentos (almacenes, compras, envíos, etc.). Después se encarga de extraer el mayor valor de los datos, desarrollando visualizaciones avanzadas con herramientas de Business Intelligence en múltiples dimensiones. Lo que permite a los líderes observar el comportamiento de los KPI.
Además, estos analistas también emplean sistemas de análisis predictivos que anticipan tendencias, cuellos de botellas, fallos, etc. Incluso, pueden utilizar sistemas de simulación para analizar distintos escenarios. Por ejemplo, para simular incrementos de demanda o rutas en el transporte de mercancías.
4. Optimización de procesos logísticos
Otra función del analista es hacer seguimiento a los procesos de la cadena de suministro y a la entrega de productos, para identificar áreas de mejora, recomendar cambios y optimizar la gestión.
Además, el analista de logística busca optimizar los procesos físicos y administrativos a través de la automatización. Para esto, evalúa las opciones más viables y necesarias para la empresa, en términos de costes, madurez digital, volumen de mercancías y cumplimiento normativo.
- Por ejemplo, un analista puede ofrecer consultoría logística para evaluar la implantación de soluciones automatizadas destinadas a la gestión de las órdenes de compra y la facturación. Esto ayuda a liberar a los equipos de tareas repetitivas y enfocar sus esfuerzos en tareas de mayor valor para la empresa.
5. Negociación con proveedores y transportistas
Las funciones del analista logístico también abarcan la dimensión comercial, especialmente la contractual. Debe negociar con proveedores y transportistas, analizando los costes totales del servicio y evaluando la inclusión de gastos clave (como almacenamiento y seguros) y de posibles penalizaciones por demora.
Su objetivo es lograr un acuerdo comercial de colaboración a largo plazo, con condiciones ventajosas. Además, asegurar que las relaciones con terceros se basen en la transparencia y en la responsabilidad de todas las partes.
6. Coordinación con otros departamentos
El rol del analista de logística también se extiende a la colaboración constante con las distintas áreas de la empresa, como producción, ventas, calidad y finanzas. Por ejemplo:
- Comparte información sobre plazos de suministro, lo que le permite al área de producción ajustar sus programas de lotes y evitar paradas por falta de insumos.
- Asesora sobre los procedimientos de manipulación de mercancía y embalaje en logística, lo que ayuda al departamento de calidad y al área de preparación del envío a garantizar la integridad del producto y minimizar las reclamaciones o devoluciones.
- Apoya al departamento de finanzas en el análisis de rentabilidad, en la elaboración de presupuestos y en la toma de decisiones en inversiones.
Retos de los analistas de logística
El analista de logística puede enfrentar una amplia variedad de desafíos a lo largo de su desempeño profesional, como:
1. Interrupciones en la cadena de suministro
Las cadenas de suministro, especialmente las globalizadas, están expuestas a riesgos geopolíticos (sanciones, cambios regulatorios o conflictos) y a catástrofes naturales que pueden interrumpir el flujo operativo, afectando la disponibilidad de materia prima o la entrega de mercancía.
Entonces, ¿el analista de logística qué hace? Diseña estratégicas con anticipación, como el establecimiento de inventarios de seguridad.
2. Evolución de la demanda
La variabilidad de la demanda representa un gran desafío. Los picos generados por tendencias virales en redes sociales y la exigencia de personalización masiva de productos están obligando a las empresas a contar con una logística extremadamente flexible.
¿El analista de logística qué hace ante este reto? Debe implementar sistemas capaces de realizar pronósticos en tiempo real, que capten datos en evolución y detecten los cambios de tendencia. Además, debe encargarse de sincronizar el inventario con los canales de venta.
3. Tecnologías emergentes
Las tecnologías emergentes ofrecen tanto oportunidades como retos operativos. Por ejemplo, la IA y el Aprendizaje Automático presentan capacidades predictivas potentes. Pero aprovecharlas al máximo implica implantar una infraestructura de datos robusta, asegurar la interoperabilidad entre sistemas y contar con talento especializado tanto en la ciencia de datos como en el mantenimiento técnico.
En este caso, el analista debe evaluar el retorno de la inversión ROI de las tecnologías avanzadas, considerando tanto los costes directos como los beneficios operativos a medio y largo plazo.
¿Cómo elegir un buen analista de logística para tu empresa?
Seleccionar a un buen analista logístico implica evaluar:
A) Experiencia en la industria
Un analista de logística que haya liderado proyectos en sectores afines al de la empresa tiene un dominio profundo de las dinámicas propias de la red de suministro, así como del marco normativo aplicable a dicha industria.
Además, su experiencia práctica le permite aportar conocimientos sobre la optimización de procesos y la gestión de la demanda en mercados altamente volátiles. Incluso, es un profesional mejor preparado para identificar oportunidades de mejora, anticipar riesgos y proponer soluciones basadas en casos de éxito.
B) Habilidades tecnológicas
Es importante que el analista de logística tenga habilidades duras. Principalmente, debe contar con sólidas competencias tecnológicas que le permitan operar con eficiencia en ecosistemas digitales complejos, así como ayudar a optimizar los entornos logísticos con tecnologías avanzadas.
Esto incluye el dominio de softwares de planificación, seguimiento y control en tiempo real, como el sistema de gestión empresarial ERP, el sistema de gestión de transporte TMS, el sistema de gestión de almacenes WMS, las herramientas de Business Intelligence BI, etc. Además, debe tener el conocimiento de cómo integrar estas herramientas para maximizar la eficiencia.
Estas habilidades tecnológicas permiten a este profesional extraer, analizar y transformar grandes volúmenes de información en insights operativos clave, para entender qué realmente significan los datos y actuar en consecuencia.
C) Capacidad de adaptarse
También son importantes las habilidades blandas. Un buen analista de logística debe ser capaz de trabajar en equipo, de poner atención a los detalles y de tener la suficiente flexibilidad para adaptarse a los cambios imprevistos.
Por ejemplo, ante picos de demanda o interrupciones del suministro por desastres naturales, este profesional debe demostrar habilidad para replantear escenarios y ejecutar planes de contingencias, con el menor impacto en la rentabilidad de la empresa.
D) Referencias
Estamos en un mercado laboral altamente competitivo, así que verificar las referencias profesionales puede ayudar a elegir bien al analista de logística desde el principio. ¿Por qué? Una referencia aporta una perspectiva de primera mano sobre su desempeño en proyectos anteriores. Es la mejor manera de confirmar las fortalezas y la capacidad de adaptación de trabajo en equipo del candidato.
¿Qué herramientas utiliza un analista de logística?
Los principales sistemas que debe utilizar un analista de logística, en entornos modernos, son los siguientes:
Software de gestión de inventarios
Es un sistema que facilita al analista de logística rastrear, organizar y supervisar el stock y todos los procesos relacionados a su gestión. Básicamente, este software almacena los datos de los productos, como el SKU, la ubicación en el almacén, la disponibilidad, las órdenes de entrada y salida, etc. Es una herramienta que permite automatizar el seguimiento del inventario e integra los datos de ventas y compras, ofreciendo al analista una visión integral.
Sistemas de gestión de transporte (TMS)
Un Transportation Management System TMS es un software especializado en la planificación y gestión del movimiento físico de mercancías, tanto en el aprovisionamiento como en la expedición. Centraliza la información clave, como la de los procesos de envío, facturas, reporting de KPI, selección de transportistas, etc.
¿Un analista de logística qué hace con un TMS? Puede coordinar los modos de transporte y los transportistas, generar, almacenar y visualizar documentación asociada (facturas, CRM, albaranes…), elegir rutas más eficientes, monitorear envíos en tiempo real (con la integración de otros sistemas de seguimiento, como el GPS en vehículos), etc.
Análisis de datos e inteligencia artificial
El uso del Big Data (datos captados de diversas fuentes: dispositivos IoT, ventas, clientes, mercado, finanzas…) y la Inteligencia Artificial ofrecen un potencial extraordinario, tanto para visualizar en tiempo real cada uno de las fases de la cadena de suministro como para proporcionar información valiosa para la toma de decisiones informada.
- Por ejemplo, herramientas como Power BI o Tableau permiten a los analistas visualizar grandes volúmenes de datos, detectar el comportamiento de clientes y patrones de consumo, predecir la demanda, automatizar la generación de informes, etc.
Ventajas de contratar a un analista de logística externo
Contar con un analista logístico externo le permite a la empresa:
1. Ahorro de costes
Un analista de logística externo ayuda a reducir los costes fijos de la estructura organizativa interna. Además, ofrece una visión objetiva y especializada de las operaciones
2. Flexibilidad
El analista externo también ayuda a la empresa a adaptar sus operaciones a los picos de demanda o a objetivos logísticos específicos, sin comprometer los recursos permanentes.
3. Especialización
Un buen analista de logística externo cuenta con una alta especialización técnica, lo que implica que domina las tecnologías emergentes y se encuentra actualizado en las tendencias logísticas y las normativas aplicables al sector.
4. Mejora continua
Por último, el analista externo posee un enfoque de trabajo que promueve la mejora continua de la cadena de suministro. Gracias al diseño de KPIS y a la aplicación de buenas prácticas implementadas previamente en diferentes sectores.
En MOLDSTOCK te ofrecemos soluciones estratégicas para optimizar el rendimiento de tu cadena de suministro. Contacta con nuestros expertos en logística, se encargarán de analizar tus desafíos y necesidades. Te ayudamos a alcanzar tus objetivos.